¡Feliz domingo!

Una de mis pasiones es la productividad, conseguir hacer mas cosas de la manera más rápida y económica posible obteniendo el mejor resultado posible.

Ser productivo no deja mucho espacio a la espontaneidad por naturaleza, porque la productividad implica organización, planificación y estructura.

Ésta semana un buen amigo me escribió para que habláramos sobre lo que está pasando en la bolsa de valores, apenas recibí el mensaje una parte de mi pensó: “No tengo tiempo, esto me va a retrasar en lo que tengo pendiente, de qué vamos a hablar, debo prepararme para ésta conversación, mi agenda está llena de cosas que realmente debo hacer”, y la otra parte de mi pensó “Doug, es un buen amigo, éste es un tema que te gusta, no hay nada que organizar, quizá esos 30-45 min igual los vas a perder leyendo cosas random en internet”.

Decidí tener la conversación y quedamos en hacerlo en vivo a través de mi cuenta de Instagram para que así también otras personas participaran y compartieran conocimientos con nosotros, gracias a esto ha sido uno de los en vivo más divertidos, interactivos y con aprendizaje que he tenido.

Últimamente nuestros encuentros, conversaciones e intercambios son planificadas, sincronizadas a través de calendarios y algunas veces estructurados para que no sean una perdida de tiempo.

Sino hubiese sido por ésta conversación no hubiese tenido tampoco un tema para escribir éste domingo.

Ésa conversación espontánea de ésta semana me recordó lo divertido que es hablar con un amigo sin planificación.

Es algo que definitivamente quiero hacer más en mi vida, ser productivamente más espontáneo.